Si su médico le ha dicho que la medicación u otra terapia no quirúrgica no es suficiente para tratar una enfermedad o trastorno urológico, la cirugía puede ser la siguiente opción.
Nuestro programa de cirugía urológica robótica es un punto de partida para obtener una primera o segunda opinión. Este tipo de cirugía especializada utiliza tecnología asistida por computadora, lo que permite a los cirujanos utilizar técnicas mínimamente invasivas para cirugías generales y complejas. Esto nos permite ser más precisos y exactos, lo que genera mejores resultados para los pacientes.
Muchos procedimientos quirúrgicos urológicos pueden realizarse de forma segura con cirugía robótica mínimamente invasiva, lo que ha transformado la forma en que atendemos a personas con tumores de próstata, vejiga y riñones, trastornos de las glándulas suprarrenales y bloqueos que interrumpen el flujo de orina.
Nuestro equipo de urología robótica tiene experiencia y habilidades avanzadas en la realización de procedimientos robóticos que incluyen:
Incisiones más pequeñas, recuperaciones más rápidas
Cuando se realiza una cirugía robótica, el robot no realiza la operación por sí solo. El cirujano sigue realizando el procedimiento, operando los brazos y las herramientas del robot desde una consola. Al utilizar el robot, el cirujano tiene una vista ampliada del interior del cuerpo y puede ver mejor las estructuras diminutas, como los nervios y los vasos sanguíneos, lo que reduce el riesgo de dañar la delicada anatomía. Las herramientas del robot también permiten al cirujano trabajar con mayor precisión y habilidad.
La cirugía robótica puede ofrecer los siguientes beneficios:
Preservando la función renal
Si necesita una operación de riñón, la cirugía robótica puede ayudar a preservar la función renal. Con la cirugía de riñón convencional, se cierran los vasos sanguíneos que irrigan todo el riñón. Esto reduce el flujo sanguíneo al tejido sano y aumenta el riesgo de una función renal reducida después de la cirugía.
Fuimos de los primeros en utilizar el sistema de imágenes por fluorescencia Firefly para mapear los vasos que irrigan un tumor renal, directamente en el quirófano. Este sistema permite a nuestros cirujanos pinzar a menudo solo los vasos que irrigan el tumor, permitiendo al mismo tiempo que la sangre rica en oxígeno siga fluyendo al resto del tejido renal sano a través de los vasos no pinzados, lo que ayuda a que el riñón siga funcionando después de la cirugía.